¿Te has preguntado alguna vez que se siente cuando viajas y lo dejas todo atrás? En la película que te propongo hoy podrás descubrir que es lo que sienten Iris (Kate Winslet) y Amanda (Cameron Díaz) cuando deciden intercambiar sus casas fechas antes de la Navidad. Ellas se darán cuenta de que este viaje cambiará sus vidas por completo, porque tras tiempo buscándolo, por fin conocen al amor de su vida. ¿Será la magia de la Navidad?
Amanda Woods, propietaria de una próspera agencia de publicidad dedicada a la creación de tráilers de películas, vive en el sur de California. Iris Simpkins, la encargada de redactar la popular columna de bodas para el London Daily Telegraph, vive en una encantadora casa en el campo inglés.
A pesar de que Iris y Amanda viven a diez mil kilómetros de distancia, las dos han llegado al mismo punto. Un poco antes de Navidad, deciden que necesitan alejarse lo máximo posible de sus respectivos novios, y ninguna está de humor para entonar villancicos.
Amanda, decidida a irse lejos durante las vacaciones de Navidad, encuentra por casualidad una página web especializada en intercambio de casas. Está convencida de que la casita de Iris es el antídoto perfecto para sus problemas. Sin pensarlo mucho, Iris y Amanda acuerdan cambiar de continente y prestarse sus casas durante dos semanas.
Iris llega a Los Ángeles un espléndido día soleado y cálido. Al poco de instalarse en casa de Amanda, en Brentwood, traba amistad con Arthur, un famoso guionista de la era dorada de Hollywood, y con Miles, un compositor que trabaja con el ex novio de Amanda.
En Inglaterra, donde el clima no se parece en nada a la soleada California, Amanda disfruta de la cómoda soledad de Rose Hill Cottage, rodeada de campos nevados, cuando Graham, el hermano de Iris, llama a la puerta.
Inesperadamente, las dos mujeres descubren que los mejores viajes son aquellos en los que se deja todo atrás.
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